martes, 20 de octubre de 2015

Pablo Iglesias versus Pablo Iglesias

Vi el debate de Pablo Iglesias versus Albert Rivera. Puede que Pablo esté cansado como dice él mismo.  Lo que no se puede es enfrentarse a la oposición y ser fuerte sólo en el discurso que ya conocemos. 

Pablo fue infinitamente inferior a la hora de proponer, de explicar las propuestas, el proyecto de Podemos. Eso no lo vi. Llegó al punto de decepcionar ver como Rivera manejaba con tanta claridad sus propuestas neoliberales. A estas alturas no se puede pecar de ingenuidad y pensar que basta con el apoyo de los de siempre, los convencidos. Sabemos que los votos de "los de siempre" ya están. Nos faltan los de los otros, los mismos que nos faltaron en Aragón, en Andalucía y en Cataluña. 

El panorama para los militantes es desolador. Hay que reconocer la gran jugada de la derecha. Ha borrado del mapa político a Izquierda Unida con ayuda de Podemos y ahora se quita del medio a Podemos gracias a Podemos y a la falta de proyecto, o peor,  no defenderlo, ni plantear ideas que convencieran a los votantes que nos llevarían a conseguir, por fin, un gobierno de izquierdas. 

No es suficiente con apuntar cuatro cosas que sabemos sacarán aplausos de la izquierda. Se trata de dar respuesta a muchos ciudadanos que esperan a estas alturas un discurso lleno de planteamientos. Aún con todo no creo que todo esté perdido, no se puede estar en Bruselas, haciendo campaña en Cataluña, conduciendo La Tuerka y enfrentando al trabajo y a desgaste que produce una campaña electoral. Si Pablo está cansado, Errejón está aún bastante lúcido.