lunes, 16 de abril de 2012

Karol Cariola - primavera de la izquierda chilena

He tenido la oportunidad de ver y oír la entrevista de Karol Cariola presidenta de las juventudes comunistas de Chile, realizada en las dependencias del Partido Comunista chileno. 
Haciendo memoria he recordado que hace unos ocho años atrás el partido comunista en Chile prácticamente no existía, no tan sólo como opción política, sino que además físicamente. No tenía una página web en condiciones, ni indicio alguno de que pudiera informar y comunicarse por medio de las nuevas tecnologías, con decir que hasta el teléfono lo tenían fuera de servicio.

Esto puede resultar no ser más que una anécdota, en realidad decía mucho de lo que hasta esos años había pasado en Chile. Una larga dictadura y un país que hasta hoy no ha gozado nunca de democracia, tal como se conoce en países más desarrollados y que se han podido sacudir pronto el polvo de sus propias derrotas democráticas. 
En Chile, una vez acabada la dictadura de Pinochet soñamos con que éramos ya, un país en democracia y vivimos todos colgados de una mentira florida. Nada más lejos de la realidad, nos han seguido gobernando políticos herederos de una constitución que muy pocos eligieron sabiendo lo que votaban, redactada por un dictador. 
Con asombro veo que el pueblo chileno empieza a cansarse de que le tomen el pelo, a mi juicio debieran patalear mucho más de lo que lo hacen sobretodo porque los líderes de gobierno siguen mostrando a Chile en el extranjero como la novia guapa de latinoamérica, mientras los ciudadanos conviven con profundas y vergonzosas desigualdades sociales. ¿Y a cuento de qué viene citar la entrevista de Cariola? A cuento de que cuando la izquierda chilena por fin parece coger aire fresco, renovarse con nuevos líderes, hay que medir mucho lo que se dice, no se puede ir a Cuba y luego desconocer que en ese país no hay una democracia, que siguen habiendo presos políticos, personas, periodístas encarcelados porque dijeron cosas que al régimen no le parecieron bien, no se puede  exclamar diciendo ...
- ¡pero en qué país se es totalmente libre! o comparar el atropello de los presos cubanos con los movimientos mapuches. 
Karol, has venido de vuelta de Cuba con el ímpetu de quien nunca pudo hablar, los cubanos lo hacen muy bien, he tenido la posibilidad de verlos en el canal cubano. Eternas mesas redondas, largas conferencias donde el único que disfruta del momento es el orador porque se extiende en el tiempo sin contemplación por el interlocutor.
Te ví y te oí en un cacareo interminable. Espero, a los cubanos, no les hayas superado y aburrido tanto como hiciste conmigo. 
Ser un buen orador u oradora en este caso, por fortuna también se aprende, tienes grandes ejemplos en Chile, el propio Salvador Allende. 
Estimada Karol, por favor, no te cargues tan pronto la primavera de la izquierda Chilena. Todos los que esperamos un cambio radical en la política chilena te lo agradeceríamos eternamente.