Hubo un tiempo en que fui más pobre que ahora, no miento si os cuento que me limpiaba el culo con periódico. Para mala suerte no solía, ir tan estreñida, como ahora. Formaba parte del ritual, coger la última página del diario, sobar, sobar y sobar el papel hasta dejarlo tan terso que no raspara la piel suave y rosácea de esos años. Más como dice el refrán "No hay mal que dure cien años" y casi sin darme cuenta pasé del rotativo a la revista "Hola" aquello era otra cosa, sin lugar a dudas mi culo agradecía la gran cantidad de páginas dedicadas a vida social. Con los años y con este referente que no es más que una anécdota en la vida de un pobre. Me he preguntado el porque de mi aversión a los periódicos, y como os daréis cuenta no es sólo por aquella experiencia, sino además por lo terrorífico que resulta leer lo mal que escriben los fichajes de los grandes periódicos. La decadencia de la prensa escrita, la desaparición de aquellos grandes columnistas que hoy gozan de buena salud en su retiro obligado.
"Cameron ha presidido (...) una reunión (...) para evaluar la respuesta a los saqueos y disturbios que han llevado en 4 días ha practicar 768 detenciones"
"No preveemos recortes masivos de empleo público"
"a elegido usted"
"también hacabó el día en rojo el español Ibex 35"
errores, horrores Comprobadlo por vosotros mismos (no hace falta que os limpiéis el culo)